El papá del pequeño Fedrandito le compró para su cumpleaños una bicicleta de marca sencilla, compró unos adhesivos que decian "TREK", una prestigiosa marca de bicicletas y se los pegó, le regaló la bicicleta y el pequeño Fedrandito fue el niño más feliz del mundo, les mostró a sus amigos su nueva bicicleta, se sentia orgullozo del color, de que fuese Trek y de que se la hubiese regalado su papá, sus amigos se rieron de él, se dieron cuenta de que la bicicleta no era de tal marca, más él hizo caso omiso de lo que decian sus amigos, porque cree en la palabra, no necesita boletas que comprueben la marca ni el valor de la bicicleta, y porque se lo habia dicho su papá, y esa palabra vale más que la de sus amiguitos, esque en esa mente infantil aún se conserva la ingenuidad.
Nosotros no creemos en la palabra a siegas, antes de confiar vemos la fuente, de eso trata el texto de Fedro, pero a mi parecer, no podemos desconfiar hasta de la sombra, dicen por ahi que "el mentiroso, aunque diga la verdad, sienpre es mentiroso", pero si no creemos, ¿cuanto nos podemos equivocar?, Fedro habla del texto, tanto escrito como hablado, que no hay que confiar sólo porque alguien lo dice o lo escribe, más yo no entiendo nada... sinceramente yo habria sido como Fedrandito, es que aún creo, y siento que siendo ciego se es más feliz.
(link texto original)
Nosotros no creemos en la palabra a siegas, antes de confiar vemos la fuente, de eso trata el texto de Fedro, pero a mi parecer, no podemos desconfiar hasta de la sombra, dicen por ahi que "el mentiroso, aunque diga la verdad, sienpre es mentiroso", pero si no creemos, ¿cuanto nos podemos equivocar?, Fedro habla del texto, tanto escrito como hablado, que no hay que confiar sólo porque alguien lo dice o lo escribe, más yo no entiendo nada... sinceramente yo habria sido como Fedrandito, es que aún creo, y siento que siendo ciego se es más feliz.
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